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Sobre la ley

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STO. TOMÁS DE AQUINO

 

SOBRE LA LEY

 

SUMMA THEOLOGIAE

PRIMERA PARTE DE LA SEGUNDA PARTE (I-II)

(Trad. Luis Inclán)

CUESTIÓN 100

Los preceptos morales de la ley antigua

ARTÍCULO 7

 

¿Están debidamente redactados los preceptos del decálogo?

 

 

Objeciones por las que parece que los preceptos del decálogo no están bien redactados.

 

1. Los preceptos afirmativos se dirigen a los actos de virtud, mientras que los negativos retraen de los actos viciosos. Pero en cualquier materia siempre se oponen las virtudes y los vicios; luego en cualquier materia sobre la que trate un precepto, debía ponerse el precepto afirmativo y el negativo. Por eso no está bien que unos sean afirmativos y otros negativos.

 

2. Dice San Isidoro que toda ley está fundada en la razón. Pero todos los preceptos del decálogo pertenecen a la ley divina; luego en todos debió asignarse la razón del precepto, y no sólo en el primero y el tercero.

 

3. Por la observancia de los preceptos merece uno premio de Dios. Ahora bien, las promesas divinas tienen por objeto los premios de los preceptos; luego debió asignarse a cada precepto su premio, y no sólo al primero y al cuarto.

 

4. La ley antigua se llama ley de temor, porque inducía a la observancia de los preceptos mediante las amenazas de las penas; pero todos los preceptos del decálogo pertenecen a la ley antigua; luego en todos debió señalarse la pena correspondiente, y no sólo en el primero y el segundo.

 

5. Todos los preceptos de Dios han de retenerse en la memoria, como se dice en Prov 3: Escríbelos en las tablas de tu corazón. Luego no está bien que sólo en el precepto tercero se haga mención de la memoria. Y así parece que los preceptos del decálogo se nos han trasmitido incorrectamente.

 

Contra esto: Está lo que se dice en Sab 11: Dios hizo todas las cosas en número, peso y medida; mucho más debió asegurar la forma conveniente de entregarnos los preceptos de su ley.

 

Solución: En los preceptos de la divina ley se contiene la máxima sabiduría; por lo cual se dice en Dt 4: Esta es vuestra sabiduría e inteligencia ante los pueblos. Pero es propio del sabio disponer todas las cosas con el modo y orden debidos; luego es evidente que los preceptos de la ley están bien redactados.

 

Respuesta a las objeciones:

 

1. A una afirmación sigue la negación de su opuesto; pero no siempre se sigue de la negación de un opuesto la afirmación de otro. Pues, si una cosa es blanca, se sigue que no es negra; pero no se sigue que sea blanca si no es negra, porque la negación se extiende más que la afirmación. De aquí es que el no se ha de hacer injuria, que corresponde a los preceptos negativos, se extiende a muchas más personas, según el dictamen de la razón, que el deber de prestar a otro un obsequio o un beneficio. Pues la razón dicta que el hombre es deudor de un beneficio u obsequio respecto de aquellos de quien recibió beneficios, si aún no los recompensó. Pero hay dos cuyos beneficios jamás se pueden recompensar suficientemente, que son Dios y los padres, según se dice en VIII Ethic. Por esto sólo se señalan dos preceptos afirmativos, uno sobre la honra debida a los padres y otro sobre la santificación del sábado, en memoria de los beneficios divinos.

 

2. Los preceptos puramente morales son de suyo evidentes, y así no fue preciso señalar su razón; pero en algunos preceptos morales se añade una razón ceremonial, o determinativa del precepto moral, como en el primer precepto: No te harás imágenes talladas, y en el tercero, en que se determina el día del sábado; y así en uno y otro caso debió asignarse la razón.

 

3. De ordinario, los hombres dirigen sus actos a alguna utilidad. Por esto fue necesario añadir la promesa de algún premio en aquellos preceptos de que no parece seguirse ninguna utilidad o que no parecen ser impedimento de ningún provecho. Y como de los padres, que van declinando en la vida, no se espera ya ningún provecho, por eso se añade la promesa al precepto de honrar a los padres. Igualmente en el precepto que prohíbe la idolatría, porque mediante él parecía impedirse una aparente utilidad que los hombres creen poder lograr mediante un pacto con los demonios.

 

4. Son especialmente necesarias las penas contra aquellos que se inclinan al mal, según se dice en X Ethic.; y así, sólo en aquellos preceptos de la ley se añade la amenaza de penas en quienes existe la inclinación al mal. Lo eran los hombres a la idolatría por la general costumbre de los pueblos, e igualmente lo eran al perjurio por la frecuencia del juramento. Por esto en los dos primeros preceptos se añade la amenaza.

 

5. Se dio el precepto sabático en memoria de un beneficio pasado, y por esto especialmente se hace mención en él del recuerdo. O porque el precepto sabático lleva consigo una determinación que no es de ley natural, y así necesitaba este precepto de una amonestación especial.

 

 
     

SOBRE LA LEY

SOBRE LA LEY EN GENERAL

I-II, q. 90, La esencia de la ley

I-II, q. 91, Las distintas clases de leyes

I-II, q. 92, Los efectos de la ley

SULLE PARTI DELLA LEGGE

Ley eterna

I-II, q. 93, La ley eterna

Ley natural

I-II, q. 94, La ley natural

Ley humana

I-II, q. 95, La ley humana

I-II, q. 96, El poder de la ley humana

I-II, q. 97, Sobre la mutabilidad de las leyes

La antigua ley

I-II, q. 98, La antigua ley

I-II, q. 99, Los preceptos de la ley antigua

I-II, q. 100, Los preceptos morales de la ley antigua

I-II, q. 101, Los preceptos ceremoniales en sí mismos

I-II, q. 102, Razón de los preceptos ceremoniales

I-II, q. 103, Duración de los preceptos ceremoniales

I-II, q. 104, Los preceptos judiciales

I-II, q. 105, Naturaleza de los preceptos judiciales

La nueva ley

I-II, q. 106, Sobre la ley del Evangelio, llamada ley nueva, en sí misma considerada

I-II, q. 107, Comparación entre la ley antigua y la nueva

I-II, q. 108, El contenido de la ley nueva