Los preceptos ceremoniales, ¿tienen razón de ser literal o
sólo figurativa?
Objeciones por las que parece que los preceptos
ceremoniales no tienen causa literal, sino sólo
figurativa.
1. De los preceptos ceremoniales, los principales eran
la circuncisión y la inmolación del cordero pascual; y
ninguna de estos dos tenían sino causa figurativa, pues
uno y otro fueron dados como señal. En efecto, se dice en
Gen 17: Circuncidaréis la carne de vuestro prepucio,
para que sea señal de alianza entre mí y vosotros. Y
de la celebración de la Pascua se dice en Ex 13: Será
como señal en tu mano y como recuerdo ante tus ojos.
Luego mucho menos los otros preceptos ceremoniales tendrán
otra causa que la figurativa.
2. El efecto ha de ser proporcionado a su causa; pero
todos los preceptos ceremoniales son figurativos, según se
ha dicho recientemente; luego no tienen más que causa
figurativa.
3. Lo que es indiferente para ser de uno u otro modo
no parece tener causa literal; pero hay cosas en los
preceptos ceremoniales en que no parece que haya motivo
para que se hagan de esta o de la otra manera; como en el
número de los animales que se han de ofrecer, y otras
circunstancias particulares como éstas: luego los
preceptos de la ley antigua no tienen razón literal.
Contra esto: Los preceptos ceremoniales figuraban a
Cristo, como también la historia del Antiguo Testamento,
pues se dice en 1 Cor 10 que todas las cosas les
pasaban en figura. Pero en la historia del Antiguo
Testamento, fuera de su sentido místico o figurativo,
había también un sentido literal; luego también los
preceptos ceremoniales, fuera de sus causas figurativas,
tenían causas literales.
Solución: Como se expuso antes, la razón de las cosas
que se ordenan a un fin es preciso tomarlas del mismo fin.
El de los preceptos ceremoniales es doble, porque
primeramente se ordenaban al culto de Dios en aquel tiempo,
y luego, a figurar a Cristo. Igual las palabras de los
profetas, que de tal manera respondían a los tiempos
presentes, que también figuraban los futuros, como dice
San Jerónimo en Super Osee. Así pues, las razones
de los preceptos ceremoniales de la antigua ley se pueden
tomar de dos maneras: una, por la razón del culto divino
que debía observarse en aquel tiempo. Estas razones son
literales, que miran a evitar el culto de los ídolos, a
recordar los beneficios de Dios, a expresar la excelencia
divina o a designar la disposición de la mente que
entonces se requería en los que daban culto a Dios. De
otro modo se pueden asignar las razones de estos preceptos
como ordenados a figurar a Cristo, y así tienen razones
figurativas y místicas, sea que se tomen del mismo Cristo
y de su Iglesia, lo que pertenece al sentido alegórico,
sea que se refieran a las costumbres del pueblo cristiano,
y es el sentido moral, sea que miren al estado de la
gloria futura, en el que somos introducidos por Cristo, y
es el sentido anagógico.
Respuesta a las objeciones:
1. El sentido de la locución metafórica en las
Escrituras es literal, porque las palabras se pronuncian
para expresar ese sentido, y, de la misma suerte, la
significación de las ceremonias de la ley son
conmemorativas de los beneficios divinos, por lo cual
fueron instituidos, o de otros casos semejantes
pertenecientes a aquel Estado, y todo esto no trasciende
el orden de las causas literales. Por consiguiente, el
señalar como causa de la celebración de la Pascua que era
un signo de la liberación de Egipto y de la circuncisión,
pacto que Dios hizo con Abrahán, todo esto pertenece a las
causas literales.
2. Esa razón valdría si los preceptos ceremoniales
hubieran sido dados sólo para prefigurar el futuro y no
para honrar a Dios.
3. Como de
las leyes humanas se dijo atrás que tienen una razón
general, pero no particular, en esto dependen de la
voluntad de los legisladores; así muchas determinaciones
particulares de las ceremonias de la ley antigua no tienen
causa literal alguna, sino sólo figurativa. Pero en
general tienen su causa literal. |